Ansiedad

La ansiedad es considerada algo negativo, desagradable, que provoca un malestar y sufrimiento inútil, debido a sus síntomas (taquicardia, sudoración, falta de aire, mareo, dificultad de concentración, insomnio, sensación de pérdida de control, miedo intenso…) y a las limitaciones que provoca, especialmente en el caso de las fobias.

Sin embargo la ansiedad también puede ser una reacción positiva, útil, que nos ayuda y protege. Esto es así tanto en aquellas situaciones en que la ansiedad es una respuesta de alarma que  prepara a nuestro organismo para actuar o huir de un peligro real, como en aquellos casos en que señala y avisa de que algo, consciente o inconsciente, no está yendo bien en nuestra vida.

Con frecuencia acuden a consulta personas, adultos o niños, con una vida aparentemente satisfactoria, o no tan complicada y que, sin embargo, sienten esa desagradable ansiedad. La ansiedad es aquí  un indicador de la existencia de un conflicto, de que hay algo que  no va bien, a lo que  no le estamos prestando atención y su única forma de expresarse es a través de estos síntomas.

En estos casos es aconsejable pedir ayuda profesional y revisar qué aspectos se encuentran en el origen y mantenimiento de la ansiedad para poder entenderlos, manejarlos y superarlos.

Soledad Cuadrado Moreno
Directora de Global Psicología